Lamela y River, una historia fugaz que involucró a Barcelona y dejó huella
El mediocampista llegó al Millonario a los seis años y dejó en inferiores pinceladas que hoy lo tienen como uno de los nominados al Premio Puskás. Debutó en Primera con 17 y fue vendido a la Roma en un momento crítico del club.
Erik Lamela nació el 4 de marzo de 1992, en la localidad de Carapachay -partido de Vicente López-, y tan solo seis años después empezó a escribir su carrera como futbolista en el club de sus amores: River Plate. Allí se insertó en infantiles y entrenaba dos veces a la semana, además de jugar amistosos los domingos.
Durante su paso por inferiores, el mediocampista que actualmente juega en Sevilla se destacó y mucho. Con la 10 en la espalda y un talentoso pie zurdo, Coco metió golazos de todo tipo en su camino hasta la Primera División, incluido uno esa marca registrada que hoy lo tiene como uno de los nominados a los Premios Puskás: la rabona.
El golazo de rabona de Lamela en las inferiores de River
La vez que Barcelona quiso llevarse a Lamela de River
Ya en 2004, en el Millonario sabían que Coco estaba destinado a ser un gran futbolista. Pero ese dato no solo lo tenían en Núñez, sino también en Barcelona. Así, el Culé vino decidido a llevárselo cuando tenía apenas 12 años. En el club español tenían claro que no solo había que convencer al chico, sino también a la familia, y por eso le ofrecieron a los Lamela Casa, trabajo y un contrato de 120 mil euros.
Todo parecía indicar que River iba a quedarse sin su diamante en bruto y así lo demostraban las declaraciones de José Lamela, padre de Coco, y el propio pequeño. Sin embargo, José María Aguilar, presidente del Millonario por aquel entonces, ideó una estrategia y pudo retenerlo: le firmó un contrato al mediocampista y becó sus dos hermanos para que pudieran estudiar en la primaria y secundaria del Monumental.
“Fue difícil, porque yo era muy chico y no tenía mucha noción de lo que me estaba pasando. Un poco también me dejaba llevar por la situación. Uno ahora crece más maduro y se da cuenta de todo lo que pasó cuando tenía esa edad, pero bueno. Fue una experiencia linda”, le dijo Lamela al sitio oficial de River en 2020, recordando cuando Barcelona vino por él.
La dura lesión de Lamela en inferiores, la recuperación y el debut la Primera de River
En 2007, cuando jugaba en Octava División, Lamela se topó con su primer gran obstáculo dentro del fútbol: una durísima lesión que lo alejó cinco meses de las canchas. Luego de un cruce con un jugador de Gimnasia y Esgrima La Plata, el mediocampista sufrió una rotura ligamentaria con fractura de tibia y desgarro forzado de soleo.
Coco logró recuperarse bien de aquella dura lesión y, luego de sacrificarse y luchar por llegar a Primera División, finalmente Pipo Gorosito le dio la oportunidad el 13 de junio de 2009. Aquella tarde, en el Monumental, Lamela, con 17 años, ingresó en el segundo tiempo y disputó 10 minutos.
“El debut fue algo soñado. Lo que todo los chicos quieren conseguir, que están ahí y que luchan tanto tiempo por algo, llega el día que tenés la posibilidad, que sabés que estás en el equipo o en el banco. Mirar a la cancha y enterarme de que estaba por debutar fue algo increíble, era todo lo que yo había soñado. Lo disfruté mucho”, aseguró hace algunos años el futbolista.
Consolidación en Primera División y salida en un momento crítico de River
Con la llegada de Daniel Passarella a la presidencia del Millonario a finales de 2009, Lamela firmó un contrato por cuatro años con una millonaria clausula de rescisión de 20 millones de euros. Para mediados de 2010, el mediocampista era titular en Primera División.
Lejos de poder disfrutar su logro personal, al joven le tocó vivir el peor momento de la historia de River, que en 2011 luchó por mantener la categoría. Lamela fue titular en los dos partidos de la promoción ante Belgrano, pero no pudo evitar el fatídico desenlace del equipo dirigido por Juan José López: el descenso a la B Nacional.
Poco más de un mes después de aquel oscuro 26 de junio, Coco fue vendido a la Roma en 17 millones de euros, lo que lo convirtió en la sexta venta más cara de la historia de River.
El golazo por el que Lamela fue nominado al Premio Puskás de The Best
El 14 de marzo de 2021, en un encuentro entre Tottenham y Arsenal por la Premier League, al zurdo, que por aquel entonces vestía la camiseta de los Sprus, le quedó para la derecha a los 33 minutos del primer tiempo y no dudó en sacar una rabona, que se terminó metiendo junto al palo izquierdo del arquero Bernd Leno. Lamela se terminó yendo expulsado en el segundo tiempo y su equipo finalmente perdió 2-1.
El golazo de rabona de Lamela, entre los finalista de los Premios Puskas
Foto 1: @cholosottile
Foto 3: FotoBaires
Fuente: TyC
Discussion about this post